viernes, 25 de marzo de 2011



¿Por qué una RED de psicoanalistas?

Es que en este mundo globalizado y tiránico en sus exigencias necias, el lazo social sufre. Cada quien es lanzado al individualismo más salvaje del sálvese quién pueda. Los criterios mercadotécnicos de los sistemas de salud, apuntan a la estandarización de los tratamientos y de las personas, que todos sirvan integrados dócilmente en el circuito de las estadísticas y las optimizaciones. ¿A quién “servirá” el terapeuta? ¿Al mercado? ¿A los laboratorios que prodigan sus pastillas mágicas? ¿A los “entes” evaluadores?Un psicoanalista asume una posición ética y política: resistir la reducción del sujeto a una cifra contable y oponerse a la manipulación utilitarista. Esto implica rechazar la adaptación a estándares o ideales fijados para la educación, el condicionamiento o la readaptación con fines de control social. Rechaza también la demanda de resultados comparables y homogéneos bajo el pretexto de “achicar costos”. ¿Cuánto cuesta el sufrimiento singular de cada uno?

Por el contrario, un psicoanalista soporta que los efectos de la práctica psicoanalítica sean ofrecidos a una evaluación cualitativa que respete la singularidad de cada caso.


La propuesta de acción Lacaniana
Ofertar una Red de Atención conformada por los analistas miembros de la institución, que contemplan- entre otras cosas- el pago de los tratamientos a la medida de cada quién; el paciente, en la medida de sus posibilidades y acordando con su analista, podrá acceder a que su palabra reciba un tratamiento específico. Al poder pagar por su sufrimiento en un psicoanálisis, se evita tener que pagar con su cuerpo por el goce voraz e insensato de la máquina.acción Lacaniana propone como integrantes de su Red de Atención a psicoanalistas comprometidos con la necesidad de dar respuesta a los malestares de la época: adicciones, anorexias, bulimias, fobias, depresión. Nombres del malestar actual que encuentra en el psicoanálisis una respuesta posible para cada uno.

Funcionamiento de la RED

                        
Sobre la Red
Hace ya algunos años los psicoanalistas –al menos los que se vinculan con el Campo Freudiano- comenzaron a salir de sus consultorios, lo que implico adoptar un método de provocación institucional que apuntó a suscitar demandas. La Red de atención de acción Lacaniana se inscribe en esa política del psicoanálisis como un intento de estar a la altura de la época.

No podemos desconocer que la era de la globalización produjo transformaciones en los lazos sociales, mostrando la fragilidad de los mismos. Como consecuencia la exigencia del Otro se traduce en una demanda de Salud mental para todos.  Jacques Alain Miller advierte que si “el discurso del amo cree en la salud mental este ideal le esta prohibido al analista que ofrecerá una vía inédita, más precaria y sin embargo más segura: la salvación por los desechos”; los desechos son lo que se extrae de una totalidad, podría ser lo que descompleta el ideal de la salud mental para todos. Suscitar las demandas sociales, para llevar el psicoanálisis mas allá de lo privado, es una apertura que debe ser evaluada en sus efectos, no para volver a cerrar las puertas sino para rectificar las posibles desviaciones.

En este contexto la Red, constituida por Miembros de acción Lacaniana, constituye un dispositivo de admisión y atención para aquellos que lo elijan. Desde la Red se hace lugar a las demandas contemporáneas del padecimiento subjetivo, bulimias, anorexias, consumismo, fobias, depresión, stress, etc. Los tratamientos en tanto orientados por los principios de psicoanálisis serán abordados en el uno por uno, situando lo singular del sufrimiento del sujeto.

Siguiendo la idea de ofertar el psicoanálisis a la comunidad, y con el objetivo de facilitar los inicios de los tratamientos, para ello contamos con honorarios accesibles; quienes consulten tendrán una entrevista de admisión en la institución y serán derivados a consultorios de la Red en donde llevaran adelante la experiencia psicoanalítica.
Carlos Jurado

Director de la Red 



La Red Ciudadana

Por Christian Ríos*
“Los analistas tienen que pasar de la posición del analista como especialista de la
desidentificación a la del analista ciudadano.”[1]1

Los efectos globalizadores, pos caída del Muro de Berlín, marcaron el punto inicial de una época regida por la lógica del consumo, el dominio de la imagen, y el avance técnico científico.

Transitamos un tiempo donde ya no se trata del malestar en la civilización, sino del trauma que es la civilización de nuestro tiempo. La perdida de los ideales, las guerras, la segregación, el terrorismo, y la violencia, apremian al sujeto y atraviesan la sociedad del trauma.
La época actual nos enfrenta a nuevas formas de presentaciones clínicas, a nuevas angustias, y a síntomas que no se organizan alrededor del nombre del padre, sino que presentan el rasgo de ser modos de goces que rechazan el inconsciente, y que dejan al sujeto cada vez más desamarrado del lazo al Otro, y librado a lo mortífero del goce.

Por otra parte, el campo de la salud mental no es ajeno a las transformaciones del Otro social. La variedad de ofertas terapéuticas no va en contramano de este tiempo, sino que responden a la lógica del mercado y a la sociedad de consumo.

Encontramos así, por ejemplo, la creciente y preocupante oferta medicamentosa que promete el sueño de la felicidad química, la propuesta de las Terapias Cognitivas Comportamentales que prescinden de la singularidad del sujeto, y ofrecen tratamientos estandarizados a partir de técnicas y programas de abordajes que valen para todos, y la hegemonía del DSM IV, que como instrumento privilegiado de diagnóstico, pronóstico y tratamiento, en sus sucesivas ediciones fue pulverizando el síntoma e instalando la clínica del trastorno y del funcionamiento.
Frente a este panorama Eric Laurent nos orienta hacia un movimiento necesario del psicoanálisis, y de los psicoanalistas: el pasaje de la posición del analista critico, agujero, vacío, al analista ciudadano.
Dicha propuesta implica pasar de la posición del analista como especialista de la des- identificación, al analista sensible a las problemáticas de la época y de su sociedad, entendiendo cual ha sido su función y cual le corresponde en la actualidad.
Hay que participar con un decir silencioso, indica Eric Laurent, intervenir sobre el campo de la salud mental, e incidir en la opinión de cuestiones precisas (por ejemplo en las transformaciones técnico científicas de los ideales y del aparato científico que se produce), para incidir así en la civilización.
El analista no puede estar ajeno a los problemas que afectan a la sociedad en la que vive. No puede desconocer los goces que allí se inscriben. Entramos de este modo en el desafío de pensar las aplicaciones del psicoanálisis para responder a una gran variedad de demandas, sosteniendo los principios del psicoanálisis de la orientación lacaniana.
La propuesta de la Red de Atención Psicoanalítica de acción Lacaniana se enmarca en esta perspectiva, apunta a dar respuestas al malestar contemporáneo, recuperando la dimensión subjetiva del síntoma, a partir de la elaboración colectiva de la experiencia clínica de cada analista.
Nos proponemos instalar, en ese movimiento del psicoanalista hacia la ciudad, el psicoanálisis en la comunidad, y ofrecer un lugar de consulta, orientación y derivación, que no solo este a la altura de la época, sino que se constituya en una propuesta diferente a la medicalización y a la estandarización de la clínica.


*Christian Ríos.  Director de acción Lacaniana. Miembro de la EOL y de la AMP

1. Eric Laurent. Psicoanálisis y Salud Mental. Capitulo: El analista ciudadano. Editorial Tres Haches. Buenos Aires, 2000.